Archivo de noviembre 2022

Fijar los objetivos personales y de la clínica para el próximo año, es uno de los pilares fundamentales para crecer como empresa y como persona. En los siguientes párrafos te contamos como hacerlo fácil y bien.

Establecer objetivos en la clínica dental debe ser primordial para una mayor productividad en un menor tiempo. Marcar y definir las metas y los objetivos que se quieren alcanzar a corto, medio y largo plazo marcarán el camino a seguir. ¿Cómo hacerlo fácil?

Primero Identifica el objetivo

El primer paso para establecer objetivos en la clínica dental, es identificar los objetivos que queremos para nuestra empresa. Estos deben ser medibles, alcanzables y específico (ver objetivos SMART). Hay que ser específicos a la hora de fijarlos, es decir, cuánto aumentará nuestra participación en el mercado o hacer una estimación de las ganancias que va a suponer el cumplimiento de dicho objetivo, no vale sólo con decir que aumentará y punto. Determinar un valor numérico, permite medirlo.

Segundo, Fijar plazos para cumplir objetivos de la clínica

Se deben fijar los límites de tiempo para cada objetivo teniendo en cuenta qué acciones serán prioritarias para nuestra clínica. Es recomendable elaborar cronogramas que permitan dividir el objetivo en pequeñas metas para trabajar en el día a día en pequeñas partes que, al final, sumarán el objetivo principal.

Tercero, identificar obstáculos y habilidades personales y de la clínica

Aunque es muy posible que aparezcan obstáculos inesperados en el camino, hay que establecer aquellos de los cuales seamos conscientes de su posibilidad de aparición. De esta manera se podrán adelantar estrategias para resolverlos. Identificar las habilidades individuales y del equipo de trabajo, permitirá repartir tareas específicas que faciliten el cumplimiento de objetivos.

Cuarto, Desarrolla un plan para cumplir los objetivos de la clínica

Lo más recomendable en para establecer objetivos en la clínica dental, es fijar periodos de evaluación parcial de los objetivos para evitar sorpresas cuando llegue la hora de su cumplimiento o para reajustar dicho tiempo de cumplimiento.

Establecer objetivos, es mucho más común de lo pensado en el ámbito odontológico. Planteamos objetivos en cada tratamiento desarrollado, para buscar el resultado deseado. Del mismo modo, si queremos que nuestra clínica crezca día a día, es necesario aplicar estas técnicas para establecer objetivos y desarrollar las actividades en búsqueda del crecimiento empresarial y personal.

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Medir el logro de los objetivos planteados al comienzo del año es una tarea importante que te permite evaluar el desempeño general de la clínica dental y de cada uno de los actores que desempeñan una tarea en ella.

Una de las premisas básicas para el éxito de toda clínica, sea un pequeño consultorio familiar o una gran empresa con múltiples sucursales, es contar con un objetivo de negocio medible. Es decir, con un indicador de metas estratégicas que se pueda describir en forma cuantitativa.

Comparar los logros del año Vs. los objetivos planteados permite determinar la eficacia de sus enfoques, productos o servicios, según corresponda. 

Esto brinda, a su vez, la posibilidad de abordar distintos puntos de vista como calidad, precisión, alcance, llegada al público objetivo, competitividad y satisfacción de clientes, entre otras múltiples variables.

¿Cuál es la mejor forma de medir el logro objetivos?

Uno de los sistemas más populares para medir objetivos en el mundo empresarial es SMARTy su nombre es un acrónimo de las expresiones en inglés Specific, Measurable, Attainable, Realistic and Time Bound. 

S (Specific): El objetivo debe ser específico y estar definido de forma clara. Una vez planteado, debe dar respuesta al qué, dónde, cuándo, cómo y por qué.

M (Measurable): Los objetivos se deben poder medir, pues es la única forma de saber si se están alcanzando o no.

A (Attainable): Las metas deben ser alcanzables y acordes con los recursos, medios y capacidades de la empresa. Se deben evitar objetivos demasiado complejos y apostar por pequeños desafíos razonables, los cuales, unidos, representarán un gran avance.

R (Realistic): Hay que trazar objetivos lo suficientemente importantes como para dedicarle recursos.

T (Time Bound): Se debe delimitar el plazo de consecución de los objetivos, orientándolos temporalmente y estableciendo una fecha de caducidad para así evitar postergaciones y demoras.

Para saber si una estrategia empresarial ha sido exitosa y ha permitido alcanzar los objetivos propuestos es preciso medir analizando ciertos indicadores de resultados. Esto resulta posible a través de los KPIs (Key Performance Indicators) también conocidos como Indicadores clave de rendimiento o desempeño de aspectos objetivos.

Cada objetivo debe ir asociado a una serie de KPI´s que ayudarán a controlar el alcance o la evolución de los mismos.

En definitiva, el KPI puede definirse como una métrica cuantitativa y específica que ayuda a ponderar los resultados de una estrategia empresarial en relación con los objetivos que se han determinado. Para saber mas sobre los KPI podes leer este post.

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Tener una buena comunicación con el paciente es la base para crear una odontología emocional, con fundamento en la confianza y fidelización. Los pacientes acuden al dentista porque tienen un problema y confían en él como experto en la materia pero crear unos lazos de unión es fundamental para que ese paciente perciba la profesionalidad de éste. Los pacientes que opinan tener una buena escucha por parte de su dentista, acuden a la clínica dental más tranquilos, con una mejor predisposición y con una buena percepción de la clínica. Recordemos que la mala fama de los dentistas a lo largo de los años, ha hecho crear una desconfianza en los pacientes, principalmente propiciada por una mala escucha.

¿Que es la inteligencia emocional? ¿Cómo se aplica a la Odontología Emocional?

La inteligencia emocional habla sobre reconocer nuestros sentimientos y los de los demás . y utilizar esos conocimientos para establecer relaciones sólidas. Bien, la odontología emocional, por tanto, se basa en ese mismo concepto de inteligencia emocional.
El dentista, ha de reconocer sus emociones y las del paciente y crear unos lazos de unión en base a sus conocimientos. Todo esto se traduce en que el dentista ha de escuchar las necesidades del paciente para llevar a cabo el trabajo de la mejor forma posible. Debemos ser capaces de transmitir confianza y tranquilidad a nuestros pacientes de manera que ellos puedan sentirse seguros en nuestras manos.

Escuchando a nuestros pacientes demostramos interés por ellos. Muchas veces erramos al no dar el trato personalizado que un paciente merece. Sistematizamos nuestra labor
como dentistas y no ahondamos demasiado en el problema del paciente a tratar. Muchas de estas cosas hacen que paciente se retraiga a la hora de acudir a la clínica ya que no se siente cómodo en un ambiente tan poco familiar.Si queremos que nuestro paciente se sienta escuchado debemos:

• Mirar a los ojos cuando se habla.
• Personalizar el trato.
• Preguntarle que le ocurre y dejar que el paciente pregunte.
• Mostrar seguridad en la propuesta de tratamiento
• Empatizar con su problema y mostrar predisposicion para ayudar.

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